Un amigo nuestro de estómago frágil cogió una intoxicación alimentaria y se encontró indispuesto durante un par de días para ir a clase. Decidió mandar un email a sus alumnos contándoles la cosa y mandándoles tarea. Simplemente un “Mañana no podré ir a clase por encontrarme enfermo, os mando tarea para que la hagáis con el profesor de guardia”. Ninguno le contestó excepto uno que, sin duda equivocándose, le respondió en vez de hacerlo a uno de sus compañeros de clase:
“Has visto, macho, el profesor no va a venir mañana. Se caga la pata abajo. El médico sólo le deja comer caldo de liebre, tío, caldo de liebre!!”
Caldo de liebre
Caldo de liebre
Caldo de liebre
Caldo de liebre
No hay comentarios:
Publicar un comentario